La tercera edad es una etapa que a menudo se asocia con una disminución de la movilidad, lo que puede tener un impacto negativo en varios aspectos de la vida cotidiana de nuestros mayores. En este sentido, una buena forma de fomentar su bienestar son los ejercicios de movilidad y flexibilidad para mayores.
La movilidad: el talón de Aquiles en la tercera edad
En este post hablaremos sobre algunos ejercicios básicos de movilidad y flexibilidad pero antes abordaremos cuáles son las principales dificultades y problemas físicos que se suelen afrontar en la tercera edad.
1. Dificultades en la vida diaria
La falta de movilidad puede dificultar la realización de tareas diarias como caminar, vestirse, ducharse o subir escaleras, lo que afecta directamente la independencia y la calidad de vida de las personas mayores.
2. Aumento del riesgo de caídas
La movilidad reducida incrementa el riesgo de caídas, una de las principales causas de lesiones graves en la tercera edad.
Mantener la movilidad y la atención en las articulaciones es crucial para prevenir estas situaciones de riesgo que pueden producirse en cualquier momento, independientemente de si los mayores están en casa o en la calle.
3. Aumento de problemas posturales, dolores y problemas cardiovasculares
La falta de movimiento puede contribuir a problemas posturales, dolores crónicos y una disminución en la capacidad cardiovascular. Es fundamental mantener una rutina de ejercicios para mitigar estos problemas.
3 beneficios de mantener la movilidad y la flexibilidad para mayores
A menudo nos da miedo pensar en personas mayores haciendo deporte. Sin embargo, la actividad física, adaptada a las necesidades y el momento vital de las personas, es una de las mejores formas de mantenerse sano y tener calidad de vida.
En el caso de la tercera edad, los ejercicios de movilidad y flexibilidad son un gran aliado y nos aportan toda una serie de beneficios:
- Mantiene o mejora la independencia y la autonomía, lo que permite realizar actividades diarias con mayor facilidad y sin ayuda.
- Previene lesiones y caídas gracias a que se mantienen las articulaciones móviles y alertas para evitar situaciones de riesgo.
- Reduce el dolor y la rigidez: Trabajar la movilidad y flexibilidad de nuestro cuerpo nos ayuda a evitar dolores crónicos y específicos, como en la espalda o rodillas, mediante la lubricación y buen funcionamiento de las articulaciones.
Ejercicios de flexibilidad para personas mayores
Para mejorar la flexibilidad en las personas mayores, es importante realizar estiramientos adecuados.
Se recomienda estirar lentamente los músculos hasta sentir una tensión moderada y mantener la posición durante unos segundos, por lo tanto nunca debemos sentir dolor al estirar.
También es crucial evitar estiramientos que causen molestias y ejercicios con rebotes.
Pautas para realizar un entrenamiento de flexibilidad
- Realizar 2 series del bloque de ejercicios, manteniendo la posición en cada ejercicio durante 30 segundos.
- Descansar 30 segundos entre cada serie.
- Mantener una buena hidratación durante el ejercicio.
- No alterar el orden de los ejercicios.
Se recomienda realizar estos ejercicios de flexibilidad a diario para mantener la continuidad y obtener beneficios más duraderos a largo plazo.
Ejemplo de bloque de ejercicios
- Cuello (flexión-extensión): Inclinar la cabeza hacia adelante y hacia atrás lentamente.
- Cuello (laterales):Inclinar la cabeza hacia los lados, llevando la oreja hacia el hombro.
- Flexores/Extensores de mano: Abrir y cerrar las manos, estirando los dedos.
- Brazo pectoral: Estirar los brazos hacia atrás, abriendo el pecho.
- Espalda: Sentarse derecho y girar lentamente el torso hacia la izquierda y la derecha.
- Cadera (laterales): De pie, separar las piernas y mover la cadera de un lado a otro.
- Isquiotibiales: Sentado, estirar una pierna hacia adelante y tratar de tocar los dedos del pie.
- Cuádriceps: De pie, llevar un pie hacia atrás y sujetarlo con la mano, estirando el muslo.
- Gemelos: De pie, apoyar las manos en una pared y estirar una pierna hacia atrás, manteniendo el talón en el suelo.
- Planta del pie: Sentado, rodar una pelota pequeña bajo el arco del pie para masajear y estirar.
Combinar estos ejercicios de flexibilidad con movimientos de resistencia o fuerza es excelente para la salud general, ya que ofrece un ejercicio completo y mayores beneficios.
En El Cel de Rubí promovemos la salud y el bienestar de nuestros residentes mediante la implementación de rutinas de ejercicio como los mencionados, adaptadas siempre a las necesidades de cada uno de nuestros mayores.
Con toda la información que tienes en este post, anímate a integrar estos ejercicios en tu rutina diaria o en la rutina de la persona mayor a la que cuides para disfrutar de una vida activa y sin limitaciones.
Antes de realizar cualquier ejercicio recuerda consultar con un médico de cabecera. Un profesional de la salud puede evaluar el estado físico y proporcionar recomendaciones personalizadas para asegurar que los ejercicios sean seguros y adecuados. Esto es especialmente importante para prevenir lesiones y maximizar los beneficios de estos ejercicios de movilidad y flexibilidad para mayores. ¡La salud y seguridad son lo primero!