Tecnología para personas mayores: herramientas y recursos para mantenerse conectados

En la actualidad, la tecnología ha dejado de ser exclusiva de las generaciones más jóvenes. Cada vez más personas mayores usan dispositivos y herramientas tecnológicas para mejorar su calidad de vida, mantenerse conectadas con sus seres queridos y aprovechar las numerosas ventajas del mundo digital. 

La tecnología amigable para personas mayores abarca una amplia gama de dispositivos, aplicaciones y recursos diseñados específicamente para satisfacer las necesidades y preferencias de este grupo demográfico. 

Impulsando el uso de las TIC

En El Cel de Rubí creemos en el uso de las TIC dentro del envejecimiento activo, mejorando la que es quizá la etapa de un ser humano con mayores cambios. De esta forma, la tecnología hace que el envejecimiento sea menos progresivo, ayudando a nuestros mayores a aprender, crecer y tomar decisiones, impulsando su autonomía, dignidad e integridad. 

Es por ello que en nuestros centros de día y residencias de mayores, empleamos las TIC como instrumento para estimular las funciones cognitivas, la memoria y la atención, cómo razonar o la orientación. 

Tratamos de mejorar la respuesta a las necesidades de los diversos contextos en los que participa la persona mayor, así como el acceso de información en redes sociales.

En El Cel de Rubí contamos con Nintendo switch y proyector, gafas virtuales, tablets, ordenadores portátiles y otros dispositivos que nuestros mayores utilizan en diferentes programas y actividades

Así, implentamos la tecnología en talleres grupales con pantallas para realizar actividades de estimulación cognitiva o juegos interactivos, actividades individuales con tablets, etc. Siempre valorando las capacidades y limitaciones de cada uno y apostando por tratamientos y actividades individualizadas.

Factores que influyen en la adaptación tecnológica de las personas mayores

Hay algunos aspectos a valorar para adaptar la tecnología a las personas mayores:

  • Limitaciones físicas: Los más mayores se enfrentan a dificultades tocando la pantalla de los dispositivos debido a problemas articulares en los dedos de las manos.
  • Limitaciones económicas por ingresos bajos.
  • Desconocimiento: La falta de experiencia previa en el uso de nuevas tecnologías hace que sea complejo entender cómo pueden utilizarlas para mejorar su vida diaria.
  • Sensación de desfase en comparación con las generaciones más jóvenes.
  • Dificultad de uso: A menudo temen cometer errores que puedan causar pérdida de información o dañar el dispositivo.
  • Edadismo: La falta de representación de la tercera edad en la publicidad de productos tecnológicos puede generar desinterés e indiferencia en las personas mayores hacia estas tecnologías.

Es esencial que las aplicaciones y plataformas tecnológicas tengan una interfaz sencilla y fácil de usar, para que cualquier persona pueda interactuar con ellas de manera intuitiva y suponga una experiencia positiva e integradora. 

Y es que a pesar de las numerosas ventajas que ofrecen las tecnologías para las personas mayores, muchas de ellas aún no se sienten completamente integradas para utilizarlas

Principales herramientas y recursos para ayudar a las personas mayores a usar la tecnología

Los smartphones y las tablets son los dispositivos tecnológicos más comunes. Estos ofrecen una variedad de funciones útiles como llamadas de voz y vídeo, mensajería instantánea, navegación por Internet y acceso a una amplia gama de aplicaciones diseñadas para satisfacer diversas necesidades.

Para las personas mayores, es importante elegir dispositivos con interfaces simples y amigables que faciliten su uso

Por ejemplo, muchos fabricantes ofrecen teléfonos inteligentes y tabletas con modos de accesibilidad que aumentan el tamaño del texto, simplifican los menús y ofrecen funciones de voz para facilitar la navegación.

Además, existen aplicaciones diseñadas específicamente para personas mayores que pueden ayudar a mantener la mente activa, monitorear la salud y facilitar la comunicación con familiares y amigos.

Dispositivos de asistencia

Para personas mayores con problemas de movilidad o discapacidades físicas, los dispositivos de asistencia pueden ser de gran ayuda

Estos dispositivos van desde bastones y andadores mejorados con tecnología, con sensores y tecnología GPS, hasta dispositivos portátiles de seguimiento de la salud (como los relojes inteligentes y las pulseras de actividad) y sistemas de alerta médica para solicitar ayuda en caso de emergencia con solo presionar un botón. 

Educación y capacitación

Para que nuestros mayores aprendan a utilizar la tecnología de manera más efectiva, muchas bibliotecas, centros comunitarios y organizaciones sin fines de lucro ofrecen clases y talleres de tecnología diseñados específicamente para personas mayores.

Estas clases suelen cubrir una variedad de temas, que van desde lo básico, como usar un teléfono inteligente o un ordenador, hasta temas más avanzados, como seguridad en línea y protección de la privacidad. 

Foto de MART PRODUCTION

11 beneficios de las tecnologías en la vida de los mayores

En general, la tecnología nos hace la vida más fácil a todas las personas. Sin embargo, en el caso de los mayores, los beneficios son muchos más. 

  1. Comunicación y conexión social

Permite mantenerse en contacto con familiares y amigos a través de llamadas telefónicas, videollamadas, email o redes sociales, lo que ayuda a reducir la soledad y el aislamiento social. 

  1. Acceso a la información

Facilita el acceso a noticias, recursos educativos y servicios en línea, manteniendo a las personas mayores informadas y actualizadas.

  1. Salud y bienestar

Dispositivos y aplicaciones de seguimiento de la salud como los relojes inteligentes pueden ayudar a monitorear la actividad física, el ritmo cardíaco y otros indicadores de salud, promoviendo así un estilo de vida más saludable.

  1. Entretenimiento

Proporciona acceso a una variedad de opciones de entretenimiento como películas, música, juegos y libros electrónicos, lo que contribuye a mantener la mente activa y a reducir el aburrimiento.

  1. Telemedicina

Facilita el acceso a la atención médica a través de consultas médicas virtuales, reduciendo la necesidad de viajar y garantizando una atención médica oportuna.

  1. Facilitación de tareas diarias

Aplicaciones de recordatorios, calendarios y listas de tareas pueden ayudar a las personas mayores a mantenerse organizadas y gestionar sus responsabilidades cotidianas de manera efectiva.

  1. Aprendizaje

Ofrece la oportunidad de adquirir nuevas habilidades y mantenerse mentalmente activo a través de cursos en línea y recursos educativos.

  1. Seguridad

Los dispositivos de seguridad en el hogar, como cámaras de seguridad y sistemas de alerta médica, pueden proporcionar tranquilidad tanto a las personas mayores como a sus familias.

  1. Accesibilidad

La tecnología puede adaptarse para satisfacer las necesidades individuales de las personas mayores, como aumentar el tamaño del texto en pantallas o utilizar asistentes de voz para realizar tareas.

  1. Afrontar nuevos desafíos

Aprender a usar nuevas tecnologías puede ser un estímulo para motivar a las personas mayores y mejorar su calidad de vida.

  1. Favorecer la autonomía

La tecnología proporciona acceso inmediato a información sobre recursos útiles y de apoyo en la vida diaria, lo que aumenta la autonomía y la independencia de las personas mayores.

En definitiva, los principales beneficios de la tecnología en personas mayores son facilitar las tareas y mejorar su calidad de vida. 

Estrategias para introducir la tecnología entre el día a día de los mayores

Es crucial proporcionar a nuestros mayores la capacitación y el apoyo adecuados para que aprovechen al máximo la tecnología. A continuación, compartimos algunas estrategias.

  • Conocer intereses y necesidades: Antes de introducir cualquier tecnología, es importante hablar con la persona mayor para comprender sus intereses y necesidades específicas y seleccionar las herramientas y aplicaciones más adecuadas para ellos.
  • Empezar con lo básico: Es mejor comenzar con dispositivos simples y tareas sencillas como usar un smartphone o  tablet para videollamadas. 
  • Ser paciente: Las personas mayores pueden sentirse abrumadas por la tecnología al principio. Es crucial ser paciente y estar dispuesto a repetir las instrucciones varias veces si es necesario.
  • Ofrecer apoyo técnico: Contar con apoyo en caso de problemas puede brindarles confianza para explorar la tecnología sin preocuparse por dificultades técnicas.
  • Proporcionar recursos educativos: Ofrece tutoriales en línea, manuales o clases que puedan ayudarles a aprender de manera escalonada y a su propio ritmo.
  • Fomentar el uso regular: Anima a las personas mayores a utilizar la tecnología de forma regular para que se familiaricen con ella y se sientan más cómodas.
  • Adaptar la tecnología a sus necesidades: Ten en cuenta si es necesario por ejemplo usar pantallas o teclados más grandes para facilitar su uso de la tecnología.
  • Celebrar los logros: Reconoce y celebra los logros de la persona mayor a medida que adquieren nuevas habilidades tecnológicas. Esto les motivará a seguir aprendiendo y explorando.

En suma, la tecnología para personas mayores ofrece numerosas oportunidades para disfrutar de una mayor independencia y mejorar su calidad de vida y mantenerse conectado en la era digital.


Rubí Social avanza hacia la sostenibilidad con la instalación de paneles fotovoltaicos

Rubí Social da un paso más en su compromiso hacia la sostenibilidad introduciendo un nuevo modelo de consumo respetuoso con el medio.

Este proyecto, financiado por los Fondos Next Generation EU dentro del Plan de recuperación, transformación y resiliencia, es parte de nuestra estrategia para conseguir un consumo y producción de energía 100% renovable y de las iniciativas centradas en la transición hacia energías más sostenibles que contribuyan a la reducción de emisiones de CO2.


Relaciones Intergeneracionales: fortaleciendo nuestro tejido social

Una parte esencial de la vida humana. Así podemos definir a las relaciones intergeneracionales. Esas conexiones que se establecen entre personas de diferentes edades y generaciones y desempeñan un rol vital en la construcción de sociedades más cohesionadas y enriquecedoras.

Las relaciones intergeneracionales se basan en la comunicación y la comprensión mutua entre personas de diferentes grupos de edad y, para que sean positivas, es importante que exista una apertura a la diversidad de experiencias y perspectivas de cada generación.

¿Qué son las relaciones intergeneracionales?

Son las conexiones que se establecen entre individuos de diferentes grupos de edad, generalmente entre personas mayores y jóvenes.

Estas relaciones se dan a diario en diversos entornos, como el familiar, el comunitario, el educativo y el laboral. Sin embargo, hay que ir al núcleo de la cuestión, a descifrar cómo estas relaciones modifican nuestra visión de la vida.

Es decir, lo más destacado no es el componente de la edad sino el de la experiencia.

Por tanto, ¿qué distingue a estas relaciones?

La oportunidad de intercambio, aprendizaje y apoyo mutuo entre generaciones.

Se produce aquí una respuesta bidireccional, pues los beneficios de las relaciones intergeneracionales funcionan en un doble sentido. Por un lado, subrayan la importancia de las personas mayores en la sociedad, y por otro lado avalan el impacto positivo de nuestros mayores sobre las generaciones más jóvenes.

Las relaciones intergeneracionales pueden tomar muchas formas, desde la interacción diaria entre abuelos y nietos hasta programas formales de mentoría en los que los más ancianos comparten sus experiencias con los más jóvenes.

En cualquier caso, el amor, el respeto, la amistad o la necesidad de cuidado y apoyo son conceptos muy presentes.

Los beneficios de las relaciones intergeneracionales

Independientemente de la forma que tomen, estas relaciones intergeneracionales favorecen a todos por igual.

La diferencia de edad no es un impedimento para la comprensión, el diálogo y el aprendizaje.

A nivel genérico, el trato entre generaciones rompe barreras y estereotipos, aumenta el respeto entre generaciones al ver al otro como un igual y supone un enriquecimiento mutuo, el refuerzo de la unidad familiar y comunitaria…

Veamos ahora los beneficios más en detalle según la edad.

Beneficios para las personas mayores

Al relacionarse con personas más jóvenes a través de diferentes actividades, los más ancianos:

  • Aprenden y mantienen el cerebro activo y un buen estado cognitivo.
  • Se sienten más útiles y se acelera el envejecimiento activo.
  • Ganan en autoestima y autoconfianza.
  • Disminuyen los pensamientos negativos y la sensación de soledad.
  • Ven cómo aumenta la red de apoyo y disminuye el sentimiento de soledad.
  • Potencian el envejecimiento activo y el sentido de propósito en la vida.
  • Disfrutan del estado de abuelo, es decir, tienen todos los beneficios y alegrías de la paternidad sin inconvenientes.

Beneficios para los más jóvenes

Para ellos se produce un:

  • Gran aprendizaje de experiencias de vida y conocimientos que pueden aprovechar.
  • Desarrollo de habilidades sociales como la empatía, la paciencia y la escucha activa.
  • El traspaso de valores y tradiciones de primera mano.
  • Se reduce la estigmatización de la vejez y se rompen mitos y prejuicios.

Un impacto positivo para siempre

¿Por qué dar por hecho el desinterés de los jóvenes por la importancia de las personas mayores en la sociedad? ¿Por qué creer que en la vejez se mira a las nuevas generaciones mayoritariamente con recelo o desconfianza?

Cuando se promueve la participación social de las personas mayores, se ponen en valor sus aportaciones y los jóvenes son más capaces de asimilar los aspectos positivos de hacerse mayores y de compartir esas experiencias.

Esas relaciones sociales con personas de otra edad generan en ambos casos un ambiente optimista, con ilusiones renovadas, nuevos retos y un sentimiento de integración y comprensión.

Grandes retos por delante

A pesar de las ventajas de las relaciones intergeneracionales, también pueden presentarse obstáculos comunes.

El más lógico es la diferencia generacional que hay que salvar, puesto que las diferencias en valores, creencias y estilos de vida pueden dar pie a malentendidos e incluso conflictos. La clave aquí está clara: una comunicación abierta y la empatía.

La brecha tecnológica también puede dificultar la comunicación y la interacción entre generaciones. La paciencia y el apoyo son fundamentales para superar esta barrera y que las personas mayores no se sientan abrumadas por la tecnología.

Por supuesto, también hay que poner un contrapeso cuando las expectativas de una de las partes pueden ser desiguales en tiempo, atención o compromiso en la relación.

¿Cómo fomentar estas relaciones? A continuación veremos algunos ejemplos como actividades compartidas, pero siempre a partir de la construcción de un puente intergeneracional para facilitar el entendimiento y el apoyo mutuo.

Actividades para fortalecer las relaciones intergeneracionales

Las actividades que fortalecen las relaciones intergeneracionales son de lo más variopinto y deben adaptarse a las preferencias y necesidades de las personas involucradas.

En El Cel de Rubí somos muy conscientes de ello. Es por eso que en nuestro centro desarrollamos las siguientes actividades intergeneracionales:

  • Actividades en Sant Jordi: Intercambio de puntos de libros y rosas con diferentes institutos de Rubí.
  • Cantar ‘Nadales’: en navidad acuden diferentes grupos de edades (guardería e infantil) a cantar Nadales y los abuelos preparan el coro de navidad e intercambian versiones y postales navideñas.
  • Proyecto de rendimiento físico: Proyecto donde estudiantes del módulo de rendimiento físico de Terrassa vienen a realizar clases al centro con y para nuestros mayores.
  • Servicio comunitario de Institutos de Secundaria: Diversos colegios e institutos de Secundaria realizan proyectos intergeneracionales en nuestro centro. Cada año conjuntamente con los colegios/institutos diseñamos una serie de proyectos que los alumnos desarrollan en el centro.
  • Proyectos junto al Instituto la Serreta: Colaboraciones con estudiantes del Grado Superior de Atención a las Personas donde preparan actividades en carnaval, Sant Jordi, navidad, etc.
  • Salidas al exterior con participación de familiares: Durante junio y julio, los jueves por la tarde se crean grupos de salidas al parque de Can Oriol, a merendar, días de playa…
  • La fiesta de las familias: Comida que se realiza en el centro en mayo, donde participan todas las familias de los usuarios y se conocen, se relacionan y se realiza una gran fiesta.
  • Visita al colegio Creanova de Sant Cugat: Nuestros abuelos realizaron diferentes talleres y enseñan a los más pequeños a plantar plantas y a jugar al dominó.

Además, estamos ultimando los detalles del futuro proyecto de "Solidaridad y juegos intergeneracionales", que se implantará en el curso 23-24.

En definitiva, fomentar la comprensión y el respeto mutuo entre generaciones es la llave para potenciar las relaciones intergeneracionales.

Sin duda, son un activo muy valioso en nuestra sociedad.

Conectan a personas de diferentes edades, generaciones y eras, permitiendo un intercambio de experiencias, apoyo mutuo y enriquecimiento personal.

Así, a medida que reconocemos y fomentamos la importancia de las relaciones intergeneracionales, podemos construir comunidades más fuertes y cohesionadas. Unas conexiones que enriquecen nuestras vidas y nos ayudan a aprender, crecer y prosperar en un mundo diverso y en constante evolución.


Una alimentación e hidratación adecuada para personas mayores durante el verano: consejos y recomendaciones

Con la llegada de la época de mayor calor del año, es importante prestar atención a la alimentación de las personas mayores en verano.

El aumento de las temperaturas y la exposición al sol pueden afectar su salud y bienestar, por lo que es crucial tomar medidas para mantener una dieta equilibrada y nutritiva.

Sufrir golpes de calor o deshidratarse por la pérdida de líquidos son algunos de los principales problemas causados en épocas de altas temperaturas. Cuando hablamos de nuestros mayores, en tanto que población vulnerable, las probabilidades de padecer alguno de estos males en verano se multiplican.

Por ello, una alimentación equilibrada, saludable y con alto contenido de líquidos, ayudará a combatir el calor en este sector de la población.

Para tener claro el qué, el cuándo y el cómo, en este artículo vamos a explorar y detallar qué alimentos deben consumir, qué bebidas deben tomar y qué deben evitar comer las personas mayores durante los meses más calurosos del año.

El consumo de agua, la hidratación y las mejores bebidas para el verano

A medida que envejecemos, nuestro sentido de la sed puede disminuir, lo que aumenta el riesgo de deshidratación. Por ello, es primordial mantener los niveles de hidratación adecuados.

Básicamente, se trata de consumir mucho líquido en diferentes formas.

Además de agua y/o aguas con frutas de temporada, son muy apetecible los zumos, leche semi o desnatada, horchata baja en azúcar, infusiones frías o la gelatina sin azúcar, que se utiliza mucho especialmente en usuarios con disfagia.

Las leches fermentadas como el yogur también poseen un alto valor nutritivo, son de muy fácil ingesta y digestión, y aportan calcio para combatir su desgaste óseo.

Concretamente, la cantidad de agua diaria debe ser de 8 vasos o más o su equivalente en comidas y bebidas líquidas, como sopas ligeras, gazpachos, zumos. Y es más que recomendable beber un vaso de agua al menos cada dos horas, aunque la persona mayor afirme que no tiene sed.

Debemos insistir en que, para evitar la deshidratación, el equilibro hídrico debe aproximarse a los 2-2,5 litros por día de agua.

persona mayor bebiendo agua

La importancia de una alimentación nutritiva y completa

Una alimentación equilibrada y nutritiva es esencial para las personas mayores durante el verano.

Todo parte de la base de consumir alimentos hidratantes, en especial frutas y verduras con alto contenido de agua, como sandía, melón, pepino y lechuga. Pero hay mucho más a tener en cuenta.

En lo que a hortalizas y verduras frescas se refiere, hablamos de una excelente fuente de vitaminas, minerales y antioxidantes. Aquí, es importante, tal y como hacemos en El Cel de Rubí, seguir las recomendaciones de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, que invita a dar más hortalizas y verduras refrescantes como ensaladas de tomate, espinacas, pepino, lechuga, zanahoria, alcachofas, remolacha, escarola, col, brotes, pimiento, etc.

Sobre las frutas está ‘todo’ escrito, siendo la sandía, el melón y el melocotón los reyes del verano, a los que añadir, por ejemplo, kiwi, manzana, fresas y arándanos.

También son recomendables las proteínas magras, es decir, optar por carnes magras, pescado, huevos, legumbres y lácteos bajos en grasa proporciona a las personas mayores los nutrientes necesarios para mantener la masa muscular y la energía.

Además, el consumo moderado de grasas saludables como aguacates, nueces y aceite de oliva, ayuda a mantener una buena salud cardiovascular. Y las grasas mono y poli-insaturadas, como las que contienen el aceite de oliva y de semillas, además de los frutos secos oleaginosos, deben incluirse más en los aderezos, comidas y meriendas.

Es decir: los alimentos con Ácidos grasos omega-3, como el aceite de oliva, el pescado azul, el marisco, frutos secos y la lechuga o espinacas, son esenciales para el fortalecimiento de la masa muscular y retrasa el deterioro cognitivo, y en especial el control de la presión arterial.

También debemos hacer un consumo habitual de cereales, siendo los más beneficiosos los integrales, como la cebada o el maíz, que no aportan grasas.

En este sentido, hay que tener muy presente la necesidad de tomar fibra para evitar estreñimientos, que es uno de los problemas más habituales en las personas mayores, y preparar legumbres o comer habitualmente frutos secos.

En definitiva, y siempre según los expertos, la dieta de una persona mayor en verano debe ser rica en fibra, agua y baja en calorías.

¿Qué alimentos y bebidas se deben evitar?

Hay algunos alimentos que deben evitarse o consumirse con moderación durante el verano.

En general, hablamos de platos de gran aporte calórico, como embutidos, carnes grasas, quesos demasiado curados o leche entera, así como un exceso de alimentos ricos en azúcares (ciertos helados, granizados o bebidas gaseosas), ya que lejos de calmar la sed, aumentarán la sensación de ella.

Más concretamente, los alimentos fritos y grasosos pueden ser pesados para la digestión y aumentar la sensación de calor corporal.

A su vez, los alimentos procesados y azucarados pueden causar fluctuaciones en los niveles de azúcar en la sangre y contribuir al aumento de peso.

En suma, debemos evitar preparaciones contundentes en forma de guisos, pucheros, fritos o asados y las sopas calientes.

Y mucho ojo también con el aumento del riesgo de intoxicaciones alimentarias: debemos consumir alimentos seguros, bien conservados, envasados o cocinados, utilizar huevo pasteurizado y tener cuidado con las salsas y mahonesas.

Y finalmente, el quid de la cuestión: el alcohol. Junto a la cafeína, el alcohol puede aumentar el riesgo de deshidratación y afectar el sueño, por lo que no se recomienda el alcohol para la gente de edad avanzada. Ahora bien: lo mejor es limitar su consumo, ya que si no está contraindicado, se puede dar una copa de vino en la comida y/o en la cena, o incluso una cerveza sin alcohol, pero sin exceder los 25 gramos al día.

Ideas de recetas para verano

Como decíamos, durante el verano son ideales las comidas más ligeras, como cremas, caldos y sopas frías en almuerzos y cenas. Entre ellas destacamos la vichyssoise, gazpacho, ajoblanco y otras recetas veraniegas.

Como segundos platos, el pescado azul y los muslos de pollo son ideales, y de acompañantes las ensaladas, arroz integral o cuscús, entre otros.

Los huevos rellenos, el gazpacho de sandía o fresas, timbal de atún y aguacate o la ensalada de lentejas son platos muy sugerentes e ideales para que nuestros mayores pasen los días más calurosos del año saciados, felices y sanos.

Recetas veraniegas en El Cel de Rubí

En nuestra residencia siempre realizamos platos especiales según la época del año. En este caso, tres de las más demandadas son el gazpacho, la ensaladilla rusa y la ensalada de verano. Aquí os dejamos los ingredientes y la receta tal y como las preparamos para nuestros residentes.

Gazpacho

  • Ingredientes: Tomates pera, pimiento verde, cebolla, pan, vinagre, agua fría, aceite y sal.
  • Modo de preparación: Primero se pelan los tomates y se trocean todos los ingredientes, se pone todo en la trituradora y cuando esta se mete en la nevera para enfriar.

Ensaladilla rusa

  • Ingredientes: patatas, judías verdes, atún, huevos, mayonesa, olivas sin hueso y pimientos rojos.
  • Modo de preparación: Primero se cuecen las patatas y las judías verdes. Se ponen los huevos en una cazuela con agua para hacer huevos duros. Se asan los pimientos rojos en el horno. Una vez está todo hecho se corta en trozos y se mezcla con el atún y las olivas. Cuando lo tenemos todo bien mezclado se añade la mayonesa y se mezcla bien. Y a la nevera a enfriarse.

Ensalada de verano

  • Ingredientes: pimientos verdes y rojos, tomates, cebolla dulce, sal, aceite y vinagre.
  • Modo de preparación: Se asan los tomates y los pimientos, una vez asados se pelan y se cortan a trozos, se corta la cebolla bien picadita, se mezcla y se hecha el aceite, la sal y el vinagre al gusto. Y a la nevera a enfriar.

Alimentación fresca y nutritiva

La alimentación es importante todos los días del año pero los meses de verano, el incremento de la temperatura hace que necesitemos consumir menos alimentos para el mantenimiento y estabilización de la temperatura corporal.

Sin embargo, las personas mayores no pueden descuidar su dieta.

Ellos necesitan un aporte energético y de nutrientes adecuado a sus necesidades, basado en alimentos con menor aporte energético (frutas, verduras y hortalizas), pero más ricos en vitaminas, sales minerales, fibra, y especialmente en líquidos (agua).


El programa de actividades de El Cel Rubí

Hay distintos temas que son de vital importancia para abordar todo lo que conlleva la vida en nuestras residencias, de algunos ya os hemos hablado anteriormente en el blog. Por ello, hoy queremos hablaros de otro tema crucial en el día a día de nuestros mayores: el programa de actividades de El Cel Rubí.

Las actividades, el motor del día a día

Nuestro centro está adaptado a las necesidades de los usuarios con el fin de garantizar el máximo nivel de autonomía y bienestar, velando nuestro personal por el bienestar durante toda la estancia del usuario en el centro y desde diversas disciplinas: auxiliares de enfermería y geriatría, médicos, servicio de enfermería, psicóloga, terapeutas, educadores y trabajadores sociales, fisioterapia, así como servicios de lavandería, peluquería, podología, transporte adaptado, acompañamiento, atención y limpieza domiciliaria y cocina propia.

En ese cuidado integral, un asunto elemental son las actividades específicas que realizan nuestros mayores.

En primer lugar, las actividades son multinivel: dentro de una misma actividad hay diferentes dificultades para que los usuarios que participan, sin importar su capacidad actual.

De esta forma, nuestros mayores siempre pueden disfrutar de la actividad, especialmente teniendo el punto terapéutico de refuerzo de capacidades y retención, para no perder tan prematuramente sus capacidades.

En El Cel Rubí tenemos claro que el objetivo de una actividad es disfrutar y ser feliz, pero todas tienen una bastante terapéutica.

Por otro lado, realizamos actividades en paralelo aprovechando los diferentes perfiles técnicos que tenemos. Un ejemplo: mientras un grupo realiza ejercicios en 'Actívate' - la gimnasia matinal-, otro grupo que no pueda seguir este tipo de gimnasia hace estimulación sensorial.

Con diferentes actividades en paralelo, podemos dar a los usuarios varias opciones según sus gustos y capacidad de seguir la actividad.

Con esta propuesta diaria, nos aseguramos al mismo tiempo que las personas con  alto deterioro cognitivo participen diariamente en alguna actividad. Su pérdida de capacidad decisoria nos lleva a reforzar el beneficio terapéutico de las mismas, y esto es de suma importancia.

Las actividades más destacadas

Disponemos de un calendario de actividades dirigidas mensual, disponemos de diferentes áreas de actuación:

  • Estimulación cognitiva: Atención i concentración, Bingo, Cálculo, Conversa, Memoria, reminiscencias, Musicoterapia, praxias, razonamiento, taller de costura, orientación espacial y temporal, manualidades, terapia canina, tertulias
  • Estimulación sensorial: estimulación basal, reconocimiento auditivo, táctil, visual y olfativo, juegos de pelota, roboterapia, estimulación en sala multiseosnrial
  • Psicomotricidad: Activate, basket, bolos, diana, juego de aros o de pelota, kriket, taller funcional.
  • Fisioterapia: Crossfit, marcha y bipedestación, fisioterapia encamados, gimnasia global extremidades
  • Ludoterapia, juegos de mesa, cartas, domino,
  • Actividades de ocio entre otras actividades de centro.

Seguro que habéis podido ver en nuestras redes sociales que no pasamos por alto ningún cumpleaños de nuestros mayores.

Cada mes la Educadora Social pone los cumpleaños de los usuarios en el calendario del comedor. Lo celebramos y felicitamos a cada persona, y si la familia quiere, puede llevar pastas o entremeses para compartir.

Pero también hacemos muchas otras actividades:

  • Sala multisensorial y roboterapia: Realizamos terapia sensorial en el espacio Snoezelen, especialmente pensado para la participación de personas con alta dependencia.
  • Tareas del hogar: De forma siempre voluntaria los usuarios que lo quieran pueden doblar toallas o baberos, ayudar a poner la mesa a las auxiliares, enrollar venas compresivas, colocar baberos a los usuarios antes de las comidas... Con ello fomentamos la autoestima y la sensación de utilidad e importancia de cada persona mayor.
  • Fiesta de la familia: Este acontecimiento anual tiene como principal objetivo incorporar a los familiares a la dinámica del centro y ofrecer a los usuarios un día en el que poder disfrutar de la familia y de los compañeros. Esta jornada festiva se basa en la celebración de una comida de hermandad.
  • Apoyo familiar: Junto a la fiesta de la familia, realizamos monográficos y sesiones formativas para familiares, donde tratamos varios temas del centro, con información específica del usuario, etc.
  • Programa de voluntariado: Ya sea con familiares, amigos o con proyectos de escuelas, practicamos el programa de voluntariado con actividades dentro del calendario, donde normalmente se comparte o muestra alguna nueva habilidad.
  • Trabajo comunitario: Realizamos salidas en la comunidad con acompañamiento de familiares y voluntarios. Visitamos y paseamos por lugares particulares del barrio donde los usuarios se sienten identificados y recuerdan vivencias pasadas.
  • Taller Solidario: Los participantes realizan varios productos artesanales a propuesta suya y estos trabajos se ponen a la venta, pudiendo destinar los beneficios a un proyecto social de su elección.
  • Taller de Cocina: Los usuarios proponen a cocina un plato a realizar que les recuerde algún hecho importante de su vida. Además, también contamos con talleres de y cocina de la cena de los viernes, donde los mismos usuarios preparan el segundo plato de la cena, empanadas, pizzas, etc.
  • Fiesta de San Jordi: Se interpreta la leyenda del dragón y San Jordi por parte de los usuarios, trabajadores y familiares. Se acude al centro de la ciudad a ver las paradas de libros y rosas
  • Fin de semana del ocio: Cada fin de semana vemos una película por la tarde, con palomitas y refrescos. Es una actividad que surgió desde el consejo de participación del centro, cuando nuestros mayores decidieron que querían cine los fines de semana. Para ello, adquirimos una televisión de 75" y disponemos de Movistar TV para que puedan elegir la película que deseen.

Actividades socio-educativas en fechas señaladas

Por supuesto, en fechas como Nochevieja, Reyes o Carnaval, celebramos las campanadas en la cena, se hace un regalo para todos los usuarios, una comida especial y roscón, y hacemos una fiesta de disfraces, respectivamente.

¿Cómo organizamos las actividades?

La Educadora social, psicóloga, la terapeuta ocupacional y la fisioterapeuta son quienes principalmente velan para hacer un calendario de actividades equilibrado y con la máxima participación.

Así, cada profesional, ya sea psicólogo, terapeuta, terapeuta ocupacional o educador social, planifica sus actividades, todas quedan registradas en nuestro software de gestión, la información es totalmente transversal y hay una buena coordinación del equipo para no repetirlas y para disponer de un calendario mensual.

Contar con la participación de todos

La participación de nuestros mayores y sus familiares, junto con el personal de El Cel de Rubí, es la base sobre la que se sustentan todas las actividades de nuestro centro. Para ello, fomentamos dicha participación de forma específica según cada grupo:

Los familiares

  • Consejo de participación
  • Encuestas de satisfacción
  • Buzón de sugerencias y quejas
  • Hojas de reclamación
  • Grupos de acogida y monográficos
  • Reuniones puntuales

Colectiva

  • Consejos de participación
  • Reuniones puntuales

Individuales

  • Encuestas de satisfacción
  • Buzón de sugerencias y quejas
  • Hojas de reclamación
  • Reuniones puntuales

Actividades fijadas en el calendario

A principios de cada año, diseñamos el Calendario anual de actividades según la participación y su éxito en el pasado curso, organizando también con antelación las distintas actividades lúdicas en función del calendario mensual de las actividades dirigidas.

Además, informamos con mucha previsión a nuestros mayores, futuros residentes y sus familias sobre las actividades de El Cel Rubí para lograr que se involucren y participen.


historia de vida

Historia de vida: su importancia en el ingreso y la vida en una residencia para mayores

En El Cel de Rubí trabajamos con un programa de Atención Centrada en la Persona (ACP) fundamental para el ingreso y la estancia de las personas mayores en nuestros centros: la Historia de Vida.

En este post, vamos a conocer a fondo esta metodología que ayuda de forma decisiva a facilitar el ingreso y la nueva vida de los residentes en los centros, mejorando las relaciones familiares y con los trabajadores y evitando la exclusión social.

¿En qué consiste la historia de vida?

Este proceso, que realizamos con el ingreso de cualquier persona en nuestra residencia de ancianos de Rubí, trata de conocer los pormenores y detalles, así como el contexto y las experiencias vividas, para de esta manera saber más y mejor, desde el inicio, los gustos y habilidades de cada usuario.

Conociendo su historia vital, hacemos que sus primeros pasos y la adaptación a su nueva vida y hogar sea más sencilla. Por ejemplo, podremos definir, dentro de lo posible, qué preferencias tiene sobre su estancia, lo que le gusta desayunar, las comidas que le gustan y las que no, para poder ofrecer un alternativo… Además de poner en común esas actividades y habilidades que cada uno posee para poder relacionarse con personas que tengan las mismas y, sobre todo, para incluirla en el programa de actividades.

En definitiva, la historia de vida de los residentes nos permite conocerles con mucho detalle y usar sus biografías para darles voz y voto, reforzar su identidad y su rol dentro de la residencia, potenciar su dignidad y hacer de este intercambio de información un reconocimiento a su memoria y a su vida.

Los objetivos de la historia de vida de los residentes

Poniendo al nuevo residente como eje central, el objetivo de apostar de conocer y confeccionar la historia de vida de cada residente es que todo el equipo de profesionales trabaje de forma conjunta para conocer en profundidad a cada uno de los mayores, sus preferencias y necesidades, saber cómo quiere ser atendido y en definitiva mejorar su calidad de vida.

Mediante este proceso, el usuario se siente en familia desde el mismo día del ingreso, y se facilita la creación de vínculos con otros residentes y los profesionales que trabajan a diario a su lado.

Al mismo tiempo, este proceso busca trabajar la estimulación cognitiva del usuario, su memoria, y una adaptación y la cohesión al centro mucho más plena.

¿Cómo se hace una historia de vida?

En la historia de vida podemos recoger todos aquellos aspectos de la vida de la persona que sean importantes para ella.

Una estructura básica pasa por conocer sus datos básicos, costumbres, gustos y tradiciones, así como los detalles de su infancia, adolescencia, madurez y presente. Desde el lugar de nacimiento a sus padres, amistades, amores, estudios, religión, trabajo, hijos, vivienda, hobbies, entorno familiar y social…

Por supuesto, también es muy interesante saber si ha vivido algún periodo histórico y que le haya marcado. Para ello, nada mejor que contar con documentos personales como fotos, libros, etc.

No hay que olvidar que, además de recoger los datos de la vida de la persona en su pasado, es vital recoger sus sentimientos / estado de ánimo en el momento actual, para determinar sus expectativas de futuro y su nuevo proyecto de vida en la residencia.

Así, esta guía vital arranca tras el primer acceso al centro con una entrevista en profundidad a la familia y al residente para ir detallando aspectos concretos de la vida de la persona. Esa información se traslada después al equipo de El Cel de Rubí, de forma que todos los profesionales (terapeutas ocupacionales, médicos, fisioterapeutas,  enfermeros, psicólogos, etc.) podrán conocer al residente, diseñar un plan a medida, personalizar la atención, etc. En este sentido, la participación coral de todos es clave para unos cuidados y atención que respeten al máximo la autonomía y capacidad de decisión de las personas mayores

El acompañamiento del centro

Y para confeccionar la historia de vida o los diferentes tipos de historias, es necesario que participe una segunda persona, además de un familiar. Habitualmente, la historia de vida normalmente la recoge el terapeuta o la trabajadora social como parte del ingreso, y va adjunta al pictograma que se realiza sobre la parte social de la persona.

Como vemos, los beneficios de apostar por esta práctica durante el ingreso de cada persona mayor son muchos. Entre los más importantes destacan:

  • Potenciamos la memoria y fomentamos la orientación espacial y temporal, dado que la persona mayor se verá obligada a evocar los recuerdos de su vida.
  • Reforzamos su identidad y reconocimiento como persona, algo especialmente útil en personas, por ejemplo, con algún grado de demencia o Alzheimer.
  • Los profesionales pueden identificar las actividades específicas para cada residente, tanto las que necesita como las que le hacen disfrutar. Esto personaliza al máximo la atención y ayuda a que la persona esté más participativa, aprende más y se vea más involucrada en las actividades de la residencia.
  • Se fortalecen vínculos con la familia.

La importancia de conocer la historia de vida de cada residente

Observando sus beneficios, podemos entender mejor lo importante que es cada historia de vida de cada residente.

Porque la historia de vida es la herramienta clave para conocer ya de entrada a las personas, y esta personalización del cuidado es la llave del éxito en la atención. No en vano, conocer a las personas que acompañamos resulta la única forma óptima de poder apoyarlas en su nuevo proyecto de vida.

Saber de cada trayectoria individual, de su personalidad única, de su estado de salud física y mental, y del contexto sociofamiliar, condicionará su respuesta ante su estancia en el centro y la nuestra como profesionales en la atención. Y es que las personas mayores, lejos de ser todas iguales, manifiestan distintas necesidades, capacidades y expectativas.

En definitiva, con esta historia de vida podemos empoderar a cada persona para ser un agente activo en su día a día y no un mero receptor de cuidados.

Este método es especialmente beneficioso en personas que tienen alguna demencia y que no nos pueden explicar su pasado, ya que necesitamos que sus familiares nos expliquen su biografía para poder hacer el mismo trabajo. En definitiva, para respetar e intentar adaptar sus cuidados al máximo, aunque la persona por cualquier motivo no se dé cuenta.